Bioelementos 2

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Los oligoelementos son micronutrientes minerales que están presentes en cantidades inferiores al 0,01% del peso corporal total. Tienen un nivel normal de concentración en cada compartimento del organismo, definido como la cantidad adecuada del elemento que garantiza el óptimo desempeño de las funciones biológicas. Si la concentración es mayor que la normal, el elemento pasa a tener características tóxicas; por el contrario, si su concentración es menor, se pueden manifestar síntomas carenciales en el ser humano. Los oligoelementos son los siguientes:

Fierro (0,004%). Se encuentra el 70% en la hemoglobina; el 3% en la mioglobina; el 1% en moléculas de la cadena respiratoria en la mitocondria y el 26% restante como reserva en forma de ferritina y hemosiderina  presentes en el hígado, bazo y riñón. Es transportado en la sangre por  una glucoproteína específica llamada transferrina. Funciones: a) transporte y depósito de oxígeno en los tejidos, el grupo hemo o hem que forma la hemoglobina y mioglobina está compuesto por un átomo de fierro, la primera es una proteína presente en los eritrocitos que transporta oxígeno desde los pulmones hacia los tejidos y la segunda, transporta y almacena oxígeno en los músculos regulando el oxígeno de acuerdo a la demanda muscular; b) participa en el metabolismo energético del transporte de electrones en la mitocondria formando parte de proteínas diferentes: citocromos en los que está unido a un grupo hemo y ferrosulfoproteínas, en las cuales se encuentra formando los llamados “centro ferro-sulfurados” o “hierro-azufre”; c) tiene acción antioxidante al formar parte de catalasas y peroxidasas que neutralizan la acumulación de peróxido de hidrógeno, radical libre que daña las estructuras celulares; d) interviene en la síntesis de ADN; e) en el sistema nervioso central participa en la regulación de síntesis de neurotransmisores y de funciones encefálicas como aprendizaje, memoria, función motora y temperatura corporal; f) interviene mejorando la respuesta inmune al integrar enzimas presentes en neutrófilos encargadas de destruir bacterias, microorganismos y materiales extraños.

Zinc (0,003%). Forma parte de más 100 enzimas, relacionadas con el crecimiento, la actividad de la vitamina A o la síntesis de enzimas pancreáticas. Las mayores concentraciones están en el hueso, próstata, ojos y preferentemente en músculos donde está la mayor proporción (60% del total). Es fundamental para: a) el funcionamiento del sistema inmune; b) el crecimiento y desarrollo de los órganos sexuales; c) mantener el sentido del gusto (apetito) y del olfato; d) facilitar la cicatrización de las heridas y e) asegurar el normal desarrollo del feto.

Cobre (0,00015%). Participa: a) en la formación de glóbulos rojos asistiendo en la fijación del fierro a la hemoglobina; b) en la parte terminal de la cadena respiratoria de electrones como cofactor de diversas enzimas; c) integrando enzimas necesarias para la síntesis de: colágeno y elastina, melanina, lípidos a nivel cerebral, enzimas antioxidantes que neutralizan los radicales libres de superóxido evitando daños celulares irreparables; d) en la absorción óptima de vitamina C.

Manganeso (0,00003%). Interviene: a) como cofactor activando innumerables enzimas, especialmente las que sintetizan glicoproteínas y glucosaminoglicanos (o mucopolisacáridos) que son indispensables para elasticidad y resistencia del cartílago; b) integrando enzimas del metabolismo de grasas e hidratos de carbono; c) en la síntesis de hormonas sexuales y tiroxina; d) en la absorción de las vitaminas B1, C y colina; e) en la síntesis de catecolaminas a nivel cerebral; f) en la síntesis de protrombina.

Yodo (0,00003%). La mayor parte se encuentra en la glándula tiroidea y es insustituible para la síntesis de hormonas tiroideas: T3 (triyodotironina) y T4 (tetrayodotironina o tiroxina). Estas hormonas regulan la temperatura corporal, la tasa metabólica, la reproducción, el crecimiento, la producción de eritrocitos, la función muscular y cerebral.

Selenio (0,00003%). Forma parte de la enzima glutatión peroxidasa que neutraliza radicales libres e hidroperóxidos de ácidos grasos poli insaturados, acción que realiza junto con la vitaminas C y E y otros antioxidantes endógenos. Es un factor de protección contra el estrés oxidativo previniendo enfermedades cardiovasculares y tumorales. Participa también en la respuesta inmune mediada por linfocitos.

Hay otros minerales necesarios para la vida, y cuya cantidad es tan pequeña que algunos lo denominan elementos traza. Ellos y sus funciones son:

Molibdeno a) Es componente esencial de varias enzimas, especialmente hepáticas; b)  interviene en la regulación del metabolismo del azufre, fierro y ácido úrico; c) enlentece el proceso natural de envejecimiento; d) colabora con el flúor en la mantención del esmalte dental y del depósito de calcio en los huesos.

Níquel a) Incrementa la acción de diversas hormonas, especialmente la insulina; b) activa una serie de hormonas que participan en el metabolismo de los hidratos de carbono; c) disminuye la acción de la adrenalina; d) favorece la absorción de fierro; e) estabiliza los ácidos nucleicos.

Cobalto a) Es constituyente de la vitamina B12 (llamada cobalamina); b) activa la combustión de hidratos de carbono; c) como componente de algunas enzimas participa en la síntesis de proteínas; d) interviene en la regulación de los sistemas nerviosos simpático y parasimpático; e) a través de la vitamina B12 participa en la maduración y crecimiento celular, en la optimización de la absorción intestinal de fierro y de yodo por la glándula tiroides.

Cromo  a) Interviene en el metabolismo de hidratos de carbono y lípidos; b) potencia la acción de la insulina.

Flúor Endurece el esmalte dental evitando la producción de caries.

Nuestro organismo necesita para su metabolismo celular el aporte de vitaminas y minerales. Diversas Instituciones de Salud y de Nutrición tanto nacionales como internacionales han establecido sus requerimientos diarios. Todos los nutrientes minerales se obtienen sin mayores problemas a partir de una alimentación equilibrada, incluso consumiendo en algunos casos alimentos fortificados, por ejemplo con calcio, yodo, flúor, etc. No obstante en muchas ocasiones es preciso el aporte de suplementos minerales.

Dr. Renato Orellana Chamudis.